Convierten jales mineros en materiales de construcción en Hidalgo.

 La Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) desarrolló una tecnología para convertir los jales mineros -restos de rocas, resultado de los procesos de molienda- en materiales de construcción, como vidrio comprimido, tejas, ladrillo.  

Lo anterior, debido a que los jales mineros representan altas concentraciones de materiales potencialmente peligrosos, que contaminan el medio ambiente y son perjudiciales para la salud.  Resultado de la actividad minera realizada en Pachuca y Real del Monte durante 500 años, más de 80 millones de toneladas de desechos minerales fueron depositados en las inmediaciones de la capital del estado, lo que representa un grave riesgo ambiental.  Juan Hernández Avila, profesor investigador del Area Académica de Ciencias de la Tierra, encabeza el proyecto para convertir este material residual en tejas de construcción, cambiando la perspectiva de un desecho mineral a un producto sustentable.  Destacó que en la capital hidalguense se encuentran alrededor de 114 millones de toneladas de jales, los cuales contienen silicio, material con el que se logró formar este producto de la construcción.  'Lo que hicimos fue la caracterización de los jales con base en su composición química, para tener una materia alterna. Pudimos procesar este material dando como resultado una teja debido a elementos con los que cuentan los residuos de mina', explicó.  Asimismo, subrayó que para la fabricación de este material de construcción es necesario utilizar 65 por ciento de residuos de jale y el resto de arcilla, formando un componente estable y libre de radicales.  Por esa razón, además de generar un elemento de bajo costo, se logra reducir los efectos secundarios en contaminación, que la existencia de los jales ha generado en la ciudad hidalguense.  'Este proyecto viene a contribuir en el aspecto social, porque con el reproceso de los jales tendremos zonas para la vivienda o desarrollo de parques', señaló.  'Además, lograremos reducir los niveles de contaminación ya que los residuos tóxicos quedarán estables y no continuarán propagándose a través del viento', puntualizó.  Actualmente, el equipo de investigadores de la máxima casa de estudios de Hidalgo continúa con las pruebas necesarias para la fabricación de estas tejas, a fin de que en próximas fechas comience el proceso de registro de patente.


Fuente: El Informador.