De esta manera se constató el compromiso de dicha empresa con el adecuado manejo forestal, el desarrollo social reflejado en las comunidades vecinas, con la conservación y protección de los recursos naturales.
Contribuyendo así en la aplicación de manejo forestal sustentable en cerca de tres mil 400 hectáreas de los predios El Llanito, Potrerillos, Tío Fermín y Guajolotes, Los Vaqueros, Buenavista y La Tuza, logro que tuvo la asesoría de profesionales de la Consultoría Ambiental Mascota S.C.
Este reconocimiento a la empresa Sánchez Monroy se da en cumplimiento a la norma mexicana NMX –AA-143-SCFI- 2008, que fue publicada en el Diario Oficial de la Federación en 2008.
Esta NOM cerciora el manejo sustentable de los bosques, evalúa el adecuado manejo forestal de predios y comunidades forestales del país, constituyendo el instrumento de certificación a nivel nacional.
Este instrumento normativo es de gran importancia, ya que además de los aspectos técnicos, contempla principios económicos, sociales y ambientales con estándares nacionales.
Actualmente la certificación se lleva a cabo por la Asociación de Normalización y Certificación A.C., organismo mexicano con más de 18 años de experiencia en evaluación de la conformidad.
Indicó que promueve los procesos voluntarios para la certificación forestal a través de los diferentes instrumentos que se operan en el país, como las auditorías técnicas preventivas, las normas mexicanas y las certificaciones internacionales.
El grupo de propietarios forestales, encabezados por Alejandro Sánchez Rosales, mantienen un método especial para el aprovechamiento forestal con técnicas denominadas manejo del paisaje, mediante el cual se busca inducir en el bosque los procesos de sucesión natural.
De esta forma, se busca el simular tener un bosque como se encontraría sin intervención, ni afectación del hombre.
A través del manejo del paisaje en sus predios se realiza un aprovechamiento sustentable de los recursos naturales mediante la obtención de materias primas forestales que reditúan en beneficios económicos, empleo y desarrollo local.
Logrando también proveer el financiamiento para la conservación del ecosistema, una de las especies que se protege es el Oyamel.
Desde 2001 este grupo de propietarios forestales ha recibido apoyos de ProArbol para la elaboración de programas de manejo forestal maderable y no maderable.
Así como de cultivo forestal, reforestación, conservación de suelos, protección y mantenimiento de áreas reforestadas, rehabilitación de caminos forestales, entre otras acciones que se han realizado.
Obteniendo previamente su certificado de la Auditoria Técnica Preventiva y convirtiéndose en pionero de la certificación nacional al cumplir con él estándar nacional.
Fuente: El Informador.
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